
La telaraña por María Laín
Después de nueve días de actividad frenética, la expedición disfrutó en Itálica y Brenes de un día relajado. Dedicamos la mañana a pasear por la ciudad de Adriano. En un ambiente distendido, algunos ruteros fingían ser gladiadores por el anfiteatro, otros jugaban a adivinar palabras por los alrededores. El cielo nublado nos protegía, como un toldo, del sol. Hacia mediodía salimos de la civilización romana, para llegar al pueblo sevillano de Brenes, cuna del director de Ruta Inti, donde nos recibió su abuela Conchita con una deliciosa comida. La tarde pasó entre talleres de dibujo, coro, circo, juegos y acrobacias que improvisamos en el césped de la piscina municipal. Habíamos recobrado las fuerzas. Después de cenar, tomamos el autobús hasta Sevilla, para dormir en el Colegio de Francisco de Paula.
Fotografía: Teresa Cabanillas