
Amanece en Dollar, una segunda oportunidad para un lugar que no trae buenos recuerdos a las expedicionarias, la última vez lo alto del lugar y la lluvia hiciera de este pequeño pueblo de Escocia un lugar desagradable para las ruteras.
El día amanece taciturno, entre gris plomizo y pseudolluvioso y por si eso fuera poco… Highlands are coming… Embrace yourselfes.
Por eso en la víspera de comenzar la gran aventura de este año las expedicionarias tendría hoy su último taller de orientación; el definitivo, la prueba de que han aprovechado los previos y son capaces de orientarse, sólo con un mapa y una brújula. Raúl Plaza como siempre, ayudado por Santiago Martínez, coordinador del programa académico Ruta Inti, prepararon una carrera en un marco espectacular: un castillo, una seta tallada en madera con monedas incrustadas, una cascada… serán algunos de los puntos elegidos para colocar las balizas que las expedicionarias deberán registrar en su cuaderno.
Por la mañana, y salvo algún incidente sin mayor repercusión, todo paso tranquilo. La bruma se estanca en este verde monte en el que nos encontramos, el frío cala, cae alguna gota, pero no hay más castigo.
Las ruteras después de comer, realizan talleres, en esta ocasión, Rebeca Casta sobre teatro musical, Gema Cañón (coordinadora de comunicación) sobre comunicación no violenta y por último, Luca Quiroga, Silvia Martínez, Miguel Gómez e Isabel Pena sobre divulgación científica.
Toca recoger el campamento, últimos momentos en Dollar que terminan dejando una sensación agridulce: el marco y la amabilidad Groff convencen, el clima y la orografía del terreno espeluznan… día de claroscuros decía… Nuestro destino será Bamff, un lugar donde por desgracia ha llovido abundantemente el día previo y ha transformado nuestro campamento en un barrizal sacado de una película sobre la Guerra de Vietnam. Nuestras ruteras están cansadas, ha anochecido y deben hacer un camino de cuarenta minutos con las mochilas.
De mala gana, organización e inteñas emprenden el camino, se dan avisos de zonas de peligro y los frontales están encendidos, a pesar de ello, una compañera sufre un resbalón y cae. Tras ser valorada, debe ir al hospital para realizar una radiografía, todos esperamos que no sea nada.
La vida por desgracia no está exenta de inconvenientes en el peor momento, las compañeras están afectadas, especialmente Santiago Martínez, que había vivido de cerca el proceso de acceso a la Inti de esta compañera, el equipo de intendencia se vuelca en animarla y darle cariño…
La Ruta genera lazos difíciles de entender, reacciones desmesuradas a situaciones insignificantes, la Ruta esa extraña burbuja que nadie entiende… aunque quizás, sólo quizás, no sea necesario. Con este pensamiento y unos fideos calientes ya en el estómago nos acostamos, el cansancio aprieta y nadie menciona las Highlands, aquí es difícil la ansiedad de futuro.
Seguiremos escribiendo crónicas aunque en mi caso, dejaré tiempo para la reflexión durante la travesía por el West Highland Way, al final habrá un resumen de las principales sensaciones y acontecimientos que ocurran.
La adrenalina y la expectación aprietan, pero por hoy toca dormir.
Nelson, Coordinador Equipo Médico