
La sorpresa del equipo que organiza la Ruta Inti ha surtido efecto; quedarse tres días en la playa de Yellowcraig sigue mejorando de humor de la expedición a pesar de la lluvia del día de ayer.
Hoy tienen un día relajado pero muy académico. Se dividen en dos grupos y descubrirán diferentes puntos turísticos fundamentales de la ciudad de Stirling.
Hablábamos hace unos pocos días sobre la importancia simbólica de Wallace durante los años de independencia escocesa, sin embargo, como tantas historias que han determinado el devenir de los pueblos su figura está sobredimensionada. Conocerán a Robert Bruce soldado escocés que lideró las tropas en la batalla que recibe el nombre de la ciudad que acogió dicha batalla acaecida en la noche de San Juan de 1314 (poco después de aquella batalla de Falkirk que conmemorábamos hace unos días) y que llevaría posteriormente a la independencia de Esocia tan sólo unos años más tarde y la cual sería conservada cdurante casi cuatro siglos.
Todo ello lo harán visitando el castillo de Stirling, el monumento de William Wallace y el Museo de la Batalla de Bannockbourn donde las expedicionarias tienen la oportunidad de jugar con un tablero virtual y reproducir la batalla entre ambos bandos. Viéndolas, uno no puede dejar de ver pequeñas heroínas escocesas dispuesta a dar su vida por Escocia, qué potentes son los juegos de rol.
Además repasarán una leyenda mística y que se repite en varias civilizaciones: los kelpies. Misteriosas figuras que podían adoptar formas antropomórficas muy apuestas y equinas que se situaban en las orillas de los ríos para que toda aquella persona que embelesada tocase su piel se quedase pegada para acto seguido hundir a su presa y devorarlas. Un nuevo uso de las leyendas: el de aleccionar y dotar de moral los pueblos.
Volvemos a Yellowcraig con un sol agradable que permite a las expedicionarias un baño en la playa donde disfrutan como cuando eran pequeñas, a pesar de la temperatura del agua.
La noche es maravillosa en el día de hoy, Jefferson Alcapán realiza una dinámica de relajación y el resumen del día y las dinámicas lúdicas de la noche se hacen arruyadas por el mar con una gran luna naranja iluminado tímidamente la escena. Tras esto, se realiza una de las noches temáticas planificadas sobre salud mental donde a través del testimonio de varias ruteras se habla sobre sufrimiento, prejuicios, sanar, comunidad… Algunas se abren en canal, otras lloran, otras escuchan y algunas por supuesto, se vencen ante el sueño y el cansancio del día.
Qué maravillosa burbuja espacio-tiempo donde se puede hablar de todo, donde los sentimientos no se juzgan, se aceptan y se intentan entender. Habrá más momentos mágicos seguro, pero una espada de Damocles empieza a apretar las conciencias: ya llevamos un tercio de ruta y eso apremia a disfrutar de lo que queda con urgencia. El tiempo… ese gran enemigo.
Una noche más en la Ruta Inti, con sus segundos avanzando, el viento azota las tiendas y poco a poco todas vamos rindiéndonos al sueño…
Mañana más.
Nelson, Coordinador Equipo Médico.